Mi forma de navegar...
Este diciembre cumplimos 28 años de casados mi marido y yo. Experiencia por demás especial que me ha permitido ver cuán felices, afortunados somos por habernos conocido, coincidido y aventurado a compartir nuestras vidas. Creo que en el horizonte de nuestra experiencia jamás concebimos la posibilidad de ver "haber si pega", de ver si duraríamos, de si seríamos fieles. En el inicio recuerdo que fue tal la felicidad de iniciar nuestra vida juntos que no pensaba si mis padres me extrañarían, sólo de recordar me estremece el corazón de alegría. En días pasados que compartía con unos buenos amigos y me preguntaban: ¿qué se necesita para llegar a 28 años de vida matrimonial? Les decía: el amor que te lleva a casarte, no es suficiente para sostenerte una vez casados, se requiere cada día más. Creo que el ser humano de por sí no es fiel. Sólo quién experimenta el Amor con mayúscula es capaz de sortear lo que nos viene cada día. Y sí, cada día es una conquista en paciencia, ...