¡A Crecer¡
En ocasiones tenemos oportunidades de crecer de las maneras más
inverosímiles. Que quisiéramos que todo nos fuera como me dice mi mamá: como
miel sobre hojuelas. Lamentablemente no suele ser así, aprovechando la fecha
les comparto parte de lo que he entendido que es crecer.
Crecer, más que el aumento de la talla, porque no es que haya crecido tanto
en estatura. En años, eso sí, habemos quienes los vamos acumulando uno de tras de
otro; en gracia…no siempre gozamos de esos despuntes que llenen de alegría
nuestro entorno día a día.
Este desarrollo al que me refiero consiste en la oportunidad de manifestar la sabiduría con
la que todos esperamos irnos engalanando. Esa con la que puedes iluminar el
camino y seguir con pie firme lo que crees o lo que has descubierto que vale la
pena defender y vivir.
Tenemos oportunidades de afianzarnos
cuando el viento de las realidades que vivimos nos viene en contra. Como el
trigo se fortalece ante el vendaval
profundizando sus raíces en la tierra para crecer y dar fruto.
En lo personal me resulta difícil pues mi ego es muy grande, por ventura se
me ha dado la oportunidad de ver mis fallos que son muchos más de los que saben
y ven los demás, aun así se me confían personas, cosas y situaciones en mis
manos para llevar a buen puerto cada una.
¿Qué significa entonces? Que es el mejor momento para vivirlas…Cómo aprendo
de los que me rodean, es algo para agradecer, esa conciencia de lo que hago mal
y me duele hasta el alma.
Vivir con la confianza plena de que se hace cada día lo mejor posible y nunca quedaremos bien con todos, es parte de nuestra condición humana.
Dialogando sobre esto con mi segunda hija me dice: señal de que es el momento para vivirlas, antes una situación semejante te habría comido, destrozado, hoy ya no te pueden hacer nada. 😮
Cuánta sabiduría en un corazón tan joven.
Estimados todos, eso quiere decir que lo que estás viviendo hoy en día no te hará daño, al contrario tienes todo para afrontarlo, resolverlo, transformarlo, mejorarlo, superarlo, conquistarlo, desecharlo...
Muy buen día para mirar de frente y avanzar a paso ligero.
Hasta la próxima
Victoria.
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