¿Cómo se siente tener lo que deseas?

¿Cómo se siente tener lo que deseas? ¿Qué sentimientos vienen a ti?

Recordaba esta experiencia vivida en una ocasión cuando entré a estudiar inglés. Todos mis compañeros eran mucho más pequeños que yo. Creían que yo era la maestra de inglés 😄, pero era también estudiante. Recuerdo en un ejercicio de redacción acerca del futuro y los deseos por alcanzar que nos dijo el maestro: anoten aquellas cosas que desean hacer: acabar una carrera, casarse, tener hijos, viajar a otro país, etc.

Yo ya había hecho todo eso.😃

¿Qué me faltaba? Escribir un libro, ser consciente y agradecida por mi vida.

Gracias por todo lo vivido, lo recibido, lo aprendido, por lo disfrutado, por lo que he probado. 

¿Cómo se siente tener lo que deseas? ¿Qué sentimientos vienen a ti?

Son preguntas que estoy ensayando en contestar...

Viene tranquilidad, viene respirar profundamente, no corto como en ocasiones en las que se siente que todo me falta.

Sin estar apretada, sin intranquilidad, respirar relajado, sin pesadillas.

Sin sentir pena por mi escasez, cuando lo alcanzaba y teníamos para salir adelante es serenidad, es ya no preguntar ¿porqué a nosotros no? Es pensar gracias, porque nosotros sí.

Es lograr lo que habíamos pensado, es poder ver más allá, es poder ver delante con menos niebla, es volar con el viento a favor, es nadar con el impulso de la corriente a favor, es aprovechar el impulso para avanzar, es sentir la fuerza para seguir, es recordar que se tiene la experiencia de llegar al final de una etapa, de una meta. 

Es aprender a mirar desde arriba. 

Solemos pensar que la conquista es como subir una montaña, dicen por ahí que lo importante no es llegar sino aprender a disfrutar del camino sin olvidar la meta. En eso consiste el vivir. Muchas veces nos concentramos tanto en la meta que el camino nos pasa desapercibido, con sus enseñanzas, con sus paisajes, con sus amaneceres y atardeceres; con las tormentas y la brisas suaves, noches frías y tardes tibias. Es en el paso a paso que se disfruta el camino.

Hoy más que nunca y a la edad que cuento me encuentro con la posibilidad de aprender cada día a disfrutar de mi camino. ¿Tú disfrutas el tuyo?¿Agradecemos la salud?¿la vida?¿nuestro trabajo?¿la compañía que tenemos?¿las dificultades y lo mucho que nos enseñan de nosotros mismos?

Esta es mi tarea actual: mirar dentro de mí, encontrarme y reencontrarme a mí para lograr ver a los demás y valorar la riqueza que tiene cada uno.

En esta ocasión pongo la imagen de Junko Tabei una escaladora japonesa, madre de familia, profesionista y primera mujer en subir al Everest; puede inspirarnos a todos. Solía decir: "no te rindas, sigue con tu búsqueda".

Hasta la próxima.

Victoria.