Mi nuevo hábito
Hay algo que caracteriza a nuestra sociedad actual y es el hecho de que vive sin esperar nada. Raro, pues la naturaleza del ser humano es esperar . El soldado en batalla espera volver, el empleado espera que concluya su jornada, la mamá embarazada espera anhelante la llegada de su bebé, los niños aguardan a la salida de la escuela la llegada de sus papás para verse en un ambiente propicio para jugar o descansar. Deseamos que pase la semana para disfrutar el fin. Esperamos anhelantes las vacaciones de diciembre porque ahora sí que me voy a divertir. Pareciera que la espera califica nuestra vida y como dice el refrán: "el que espera desespera" Vamos con una cara de desesperación, la mostramos en la forma en la que hablamos, los modales con los que nos tratamos, la impaciencia con la que vemos los procesos de crecimiento en los niños y los adolescentes como si tuvieran la culpa de ir más despacio por el largo de sus piernas o la imposibilidad de poder realizar l...